¡En esta tarde de julio, El sol festeja al amigo!
¡Este nuevo aniversario, De maestro solidario!,
¡Todo junto al universo…También celebra al maestro!
Todos los niños de este centro educativo primario y secundario en coordinación con las secciones de primaria y secundaria, han organizado un sencillo programa para celebrar su día a todo el personal que labora en esta escuela.
¡Maestro, creo en ti! En tu incansable labor, en tu enseñanza certera, en tu sublime vocación, Porque en todas tus lecciones, entregas tu corazón.
Tu misión de gran de maestro, queda sembrada en el tiempo,
Como símbolo inmortal que un día servirá de ejemplo.
Maestro: jamás buscas riquezas, como pago a tu labor,
Ni has pedido monumentos, ni falsas promesas de amor.
Tu labor digna y altruista vivirá en la eternidad.
Yo estoy contigo fiel maestro, apoyo tu lucha, aplaudo tu labor,
e invito al pueblo, al cual tu perteneces,
te den su mano y acepten tu razón.
Tranquilo está tu semblante, muy serena tu mirada,
se ve limpia tu conciencia, como limpia está tu alma.
Y la misma luna del cielo cantará esta noche en tu almohada. ¡Porque en cada rincón hay un maestro!
Enseñando paso a paso sus deberes,
Porque en cada escuela de la Tierra,
Encontrarás mil niños que lo esperen.
¡Este nuevo aniversario, De maestro solidario!,
¡Todo junto al universo…También celebra al maestro!
Todos los niños de este centro educativo primario y secundario en coordinación con las secciones de primaria y secundaria, han organizado un sencillo programa para celebrar su día a todo el personal que labora en esta escuela.
¡Maestro, creo en ti! En tu incansable labor, en tu enseñanza certera, en tu sublime vocación, Porque en todas tus lecciones, entregas tu corazón.
Tu misión de gran de maestro, queda sembrada en el tiempo,
Como símbolo inmortal que un día servirá de ejemplo.
Maestro: jamás buscas riquezas, como pago a tu labor,
Ni has pedido monumentos, ni falsas promesas de amor.
Tu labor digna y altruista vivirá en la eternidad.
Yo estoy contigo fiel maestro, apoyo tu lucha, aplaudo tu labor,
e invito al pueblo, al cual tu perteneces,
te den su mano y acepten tu razón.
Tranquilo está tu semblante, muy serena tu mirada,
se ve limpia tu conciencia, como limpia está tu alma.
Y la misma luna del cielo cantará esta noche en tu almohada. ¡Porque en cada rincón hay un maestro!
Enseñando paso a paso sus deberes,
Porque en cada escuela de la Tierra,
Encontrarás mil niños que lo esperen.
